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En 2024, por semana se reportan 100 mordeduras de serpientes a personas en Colombia

Según el Instituto Nacional de Salud, estos incidentes ocurren en zonas rurales del país. En lo que va del año se reportan 1.546 casos.

El Instituto Nacional de Salud (INS) reveló que en el país, en promedio, cada año recibe la notificación de 4.500 accidentes ofídicos. Lo que muestra que por cada 100.000 colombianos, entre 8 y 10 tienen el riesgo de sufrir uno y que menos del 1 % de los accidentes que se presentan pueden ser letales.

Los accidentes ofídicos es aquel que es causado por la mordedura de serpientes que poseen e inoculan sustancias tóxicas, que pueden lesionar los tejidos y provocan alteraciones fisiopatológicas en la víctima.

Si bien el INS señala que estas cifras son relativamente bajas y son pocas las serpientes de importancia médica en el país, cuando ocurre un accidente de este tipo con una serpiente de tipo venenosa se debe acudir en el menor tiempo posible a un hospital o centro médico cercano.

Según cifras de esta entidad, en lo corrido de 2024 han sido notificados 1.546 accidentes de este tipo, de los cuales 17 proceden del exterior y 1.529 ocurrieron en territorio colombiano.

“Esto quiere decir que, en promedio, por semana, tenemos una notificación de cerca de 100 casos y la incidencia para el país es de 2.90 casos por cada 100 mil habitantes, según las proyecciones poblacionales del DANE”, afirmó Leonardo Gómez, referente del INS para la vigilancia del accidente ofídico.

Los departamentos que más casos notifican son Antioquia, Córdoba, Norte de Santander, Meta, Cesar, BolÍvar, Chocó y Caquetá, territorios que históricamente han tenido la presencia del evento y que son siempre los que aparecen en los primeros lugares en cuanto a número de casos.

Zonas del país que presentan mayor incidencias de casos por cada 100.000 habitantes.

Respecto a la letalidad del evento, el porcentaje de fallecidos en este momento está en 0,20 %. En 2024, tres accidentes letales han ocurrido en los municipios de Chocó, Antioquia y Valle del Cauca.

Ante esto, el Instituto recordó la importancia de que las Entidades Administradoras de Planes de Beneficios (EAPB) y su red de instituciones prestadoras de servicios de salud con sus gestores farmacéuticos mantengan disponibilidad de antivenenos.

Al respecto, la médica toxicóloga del INS, Diana Pava, expresa que “todos los antivenenos están financiados por el sistema de salud. Tenemos normatividad clara sobre la responsabilidad de garantizar los antivenenos”.

A su vez, el director del INS, Giovanny Rubiano García, le pidió a esas entidades, a las Secretarías de salud y red de instituciones prestadoras de servicios de salud garantizar la disponibilidad de antivenenos.

“Muchos de los accidentes ofídicos que ocurren en municipios cercanos u otros son atendidos en la capital. Así que la disponibilidad de los medicamentos contra el accidente debe garantizarse en todo el territorio nacional”, manifestó.

Actualmente, el Decreto 386 de 2018 y Circular 048 de 2022 son el marco normativo para que las responsables mantengan la disponibilidad de antivenenos en el país. Para ello, el INS recuerda que es el único oferente público de sueros antiofídicos polivalentes que cumplen con buenas prácticas de manufactura y registro sanitario del INVIMA.

En cada muerte por la mordedura de una serpiente que es analizada por el equipo técnico del INS se han encontrado dos factores que persisten. El primero es la baja percepción del riesgo en la población, la consulta tardía, la implementación de prácticas no médicas y el tiempo de acceso a los antivenenos.

Por lo general, el accidente ofídico es un evento de tipo rural disperso, es decir, lejos de un punto de atención y cuando el paciente ingresa puede no haber disponibilidad del antiveneno o sus dosis no son completas acorde a la severidad del envenenamiento.

El INS entrega a las personas que se vean afectadas por la mordedura de una serpiente las siguientes recomendaciones: mantener la calma; acudir con el paciente en el menor tiempo posible al hospital o centro médico más cercano; describir al personal de salud toda la información posible sobre el accidente, incluyendo datos de la serpiente que ocasionó el accidente; lavar la zona de mordida con agua y jabón, así como trasladar al paciente en camilla y evitar su movimiento.

 

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